SKATEPARK

by Paula Alfonso

Este proyecto atiende a la demanda popular de creación de espacios saludables, que potencien la actividad física y la socialización, así como la reordenación del espacio público con ambientes idóneos para todas las edades y actividades. En este caso concreto, buscando cubrir las necesidades de prácticas tales como el skate, la calistenia y el parkour.

La práctica de estas disciplinas ha estando siempre ligada al mundo urbano. Aunque el skate debuta en los JJOO en el año 2020, es en el streetstyle donde mantiene su espíritu más primario. Los skateparks pueden entenderse como combinaciones de fosos, planos inclinados y todo tipo de mobiliario urbano que sirven para la realización de distintas acrobacias dentro del mundo del skate. Tanto para los que son más de patines como para aquellos que prefieren la bicicleta, estos espacios multifuncionales son el lugar perfecto para su práctica. El parkour, por su lado, es el arte del desplazamiento, una disciplina basada en la capacidad de trasladarse de un punto a otro de la manera más eficiente posible. Su práctica implica respeto hacia los ciudadanos y un conocimiento excepcional de su entorno. Por último la calistenia, un sistema de entrenamiento que se vale del peso corporal, buscando la belleza y armonía del movimiento en cada ejercicio, convirtiéndola en una actividad apta para el público de todas las edades.

Nuestra propuesta consiste en una plaza muy dinámica. La espiral de Fibonacci, o espiral áurea, relacionada con las ondas y el movimiento, es el hilo conductor de un diseño que expresa fluidez y dinamismo.

De esta forma, organizamos el espacio en varias zonas: el bowl, dedicado a la práctica del skate, se sitúa en el centro de la espiral, aprovechando su geometría; los recorridos por rampas, escaleras y barandillas, donde los aficionados realizan acrobacias y saltos, se sitúan bordeando el lomo de la espiral y, por último, la zona de parkour y calistenia, donde los usuarios podrán disfrutar de un entorno controlado de muros, barandillas y barras, situado hacia el borde interior de la plaza. Así, todas estas prácticas, perfectamente compatibles, permiten una convivencia amable de sus espacios, que se mezclan en perfecta armonía.

mobiliario urbano que sirven para la realización de distintas acrobacias dentro del mundo del skate. Tanto para los que son más de patines como para aquellos que prefieren la bicicleta, estos espacios multifuncionales son el lugar perfecto para su práctica. El parkour, por su lado, es el arte del desplazamiento, una disciplina basada en la capacidad de trasladarse de un punto a otro de la manera más eficiente posible. Su práctica implica respeto hacia los ciudadanos y un conocimiento excepcional de su entorno. Por último la calistenia, un sistema de entrenamiento que se vale del peso corporal, buscando la belleza y armonía del movimiento en cada ejercicio, convirtiéndola en una actividad apta para el público de todas las edades.

Nuestra propuesta consiste en una plaza muy dinámica. La espiral de Fibonacci, o espiral áurea, relacionada con las ondas y el movimiento, es el hilo conductor de un diseño que expresa fluidez y dinamismo.

De esta forma, organizamos el espacio en varias zonas: el bowl, dedicado a la práctica del skate, se sitúa en el centro de la espiral, aprovechando su geometría; los recorridos por rampas, escaleras y barandillas, donde los aficionados realizan acrobacias y saltos, se sitúan bordeando el lomo de la espiral y, por último, la zona de parkour y calistenia, donde los usuarios podrán disfrutar de un entorno controlado de muros, barandillas y barras, situado hacia el borde interior de la plaza. Así, todas estas prácticas, perfectamente compatibles, permiten una convivencia amable de sus espacios, que se mezclan en perfecta armonía.

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